En casos moderados y severos de ectropión-entropión, en los que el tratamiento lubricante no es suficiente se indica una cirugía que tiene como objetivo colocar los párpados en la posición correcta. Existen varias técnicas, que se seleccionan según el paciente y apuntan a corregir la laxitud palpebral y/o la insuficiencia de los músculos retractores. El procedimiento se realiza bajo anestesia local y sedación.